La fogosidad de Aday Sousa calienta el vestuario
Se presenta en nuestro vestuario como una persona provocativa y exhibicionista
Natural de Las Palmas de Gran Canaria, nuestro invitado de hoy se considera un amante de su isla y su clima. Peluquero, bailarín y con algunos pinitos en el mundo de la moda, a sus 26 años, este culo inquieto, provocativo y exhibicionista ha llegado para inundarnos con su energía positiva. Sube la temperatura, ya que la fogosidad de Aday Souda calienta el vestuario.
Aday Sousa se considera "un chico extrovertido, pero a la vez tímido, aunque esa timidez desaparece muy rápido, ya que soy un chico que le gusta estar rodeado de gente que tenga un toque de locura". Y es que confiesa que vive su día a día "como si del último se tratase", añadiendo que "soy muy intenso, pero de los que dan energía, no de los que la quitan, o eso espero".
Lo que más llama la atención de este canario de 26 años es su físico, como primera impresión, aunque "al conocerme, mi físico pasa a un segundo plano". Aday se considera una persona "provocativa y exhibicionista", ya que, como él mismo explica, "me encanta gustar y que los demás también se sientan gustados".
Si tuviese que quedarse con una parte de su cuerpo, lo tiene claro, "mis piernas, ya que mis padres me dejaron una buena genética". Y si hablamos de complejo, Aday nos lleva a su infancia, cuando, de pequeño "tenía un trauma importante con mis orejas de soplillo", confesando que "gracias a Dios, mi abuela me ponía para dormir una cinta de pelo para corregírmelas, y lo consiguió, así que ¡¡fuera dramas!!".
Su físico es producto del deporte, "que hago siempre", pero también de "llevar una vida muy activa, ya que soy un culo inquieto". Además, Aday confiesa que, como buen canario, "soy muy fogoso", ya que, "no sé si el clima influye, pero aquí en Canarias somos muy sensuales y sexuales".
A la pregunta de si se desnudaría públicamente, la respuesta es clara: "siempre, ya que en mi Instagram casi todas mis fotos son de ese estilo y en Twitter, mucho más". Sobre lo que más gusta de su cuerpo a los hombres, no lo tiene muy claro, ya que "depende del tipo de chico que me entre o de lo que quieran hacerme. "Así que no sé muy bien que contestar".
Lo que sí parece que tiene más claro es lo que más le gusta a él de otros hombres, ya que, "en lo primero que me fijo es en su cara y me da igual el cuerpo si la cara me atrae y me pone". Eso sí, añade, "no suelo fijarme en chicos exageradamente guapos... soy más de chicos atractivos, expresiones de la cara muy marcadas, sonrisas bonitas, actitudes chulescas pero sin llegar a la prepotencia y siempre desde la humildad". Y esencial, apunta, "que tengan un buen plátano Canario".
Sobre si ha dudado alguna vez de la heterosexualidad de un hombre.... "he dudado cuando me la meten en la boca, jejeje, ¡qué burro soy! ... No, ahora enserio, yo desde hace muchos años siempre dudo de la heterosexualidad de los hombres, ya que he tenido la suerte de sacar a un par de ellos del armario".
Hablando de proposiciones deshonestas, indecentes o muy fuertes, Aday nos cuenta que en esta vida "me han ofrecido de todo: dinero,viajes,casas o una vida resuelta, pero nunca he aceptado nada, ya que soy muy amante de mi libertad".
Si sólo pudiera lucir una prenda o complemento sobre su cuerpo, "sería algo de cuero, seguro". Y, a la hora de vestir sus interiores, "siempre con slip, ya que me gustan las cositas bien agarradas y sujetas".
Cuando va a los vestuarios, le gusta destaparse y mirar siempre que puede, ya que, cuestiona, "¿qué clase de gay es el que puede contener la mirada?". Además, "tengo más que comprobado que, da igual si eres gay o hetero, todos los tíos miran". Pero si pudiera encontrare con un chico en el vestuario le gustaría que "fuese como yo, alguien que se atreva a todo". Y es que, como ya hemos advertido, la fogosidad de Aday Sousa calienta el vestuario.
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