Una orgía perfecta

Crítica de la escena porno París Perfect de la productora NakedSword Orginals.

El Acomodador ha vuelto a abrir la sala de Cine X de este vestuario y lo ha hecho para echar un vistazo a una de las escenas nominadas al premio de la mejor escena de los Prowler European Porn Awards, que se conceden el próximo día 16 de mayo. Hablamos de la secuencia final de la película París Perfect, dirigida por Mr. Parker para el estudio NakedSword Originals, y que cierra la cinta con una orgía perfecta.




En el porno, como ocurre con el cine convencional, el realismo es mucho más palpable en las producciones europeas que americanas. Y eso es lo que más me ha llamado la atención de París Perfect, al menos de la orgía final, que es la escena por la que he pasado la lupa crítica, la lente amplificada, para analizar hasta el último detalle.

Esta cinta de cine para adultos cuenta la historia de dos amigos americanos, Colton y Johnny, que viajan a París para olvidar la ruptura sentimental del primero con el actor porno Trenton Ducati. En la ciudad del amor se ven envuelto en un enredo, dirigido por Theo, y con dos sicarios españoles, Dani y Dennis, de por medio. Entre medio, el despechado Colton mantiene un tórrido encuentro sexual con la estrella porno Francois Sagat.

Toda esta situación lleva a sus protagonistas a la secuencia final, en la que los dos amigos mantienen relaciones sexuales con los sicarios españoles ante el atento objetivo de Theo, que no pierde detalle de lo que allí pasa con su videocámara. Como una especie de deuda pagada, que no he terminado de entender, ya que, desde aquí hago un llamamiento para que el cine porno, al menos el que tiene un argumento de trasfondo, sea subtitulado.

A lo que vamos, que el director nos presenta a cinco tíos follando en una cama de una casa de techo muy bajo, lo que genera en algún momento una sensación claustrofóbica, unida al mareo que, en un principio, provocan los rápidos movimientos de cámaras. Claustrofobia y mareo superado, el espectador logra sumergirse no en una escena de cinco tíos manteniendo sexo, sino en cinco tíos manteniendo sexo y que son grabados para una escena. Creo que la diferencia es clara y evidente.



Si el porno pudiese olerse, la escena final de París Perfect olería a sexo puro y duro, que es lo que se desprende de la filmación de esta secuencia, en la que todos los actores hacen un papel espectacular y súper morboso. Todos, muy bien dirigidos y filmados en una coreografía sexual perfecta, que no es nada fácil, pero que se salda con muy buena nota.

La cámara casi se mezcla durante toda la escena con los actores, como si fuese uno más de ellos, en la cama, nunca desde fuera, como un objetivo espectador. Como si el público participásemos, desde el prisma de su objetivo en todo lo que allí está pasando, no perdiendo ningún detalle, como si estuviesen follando, literalmente, delante de nuestras narices..

Y es que lo importante es el encuentro sexual y, por ello, Mr. Parker ha optado por suprimir la música en esta escena. Sólo se oye el sonido ambiente, los jadeos y exclamaciones sexuales de sus protagonistas,y ¿quién necesita nada mas? La escena, a pesar de su media hora larga de duración, no se hace pesada en ningún momento, no tirando del truco de los planos recursos, que se repiten una y otra vez en otras producciones.

Destacar el personaje de Theo Ford, el hombre de la cámara, que pasa de una posición exclusivamente voyeur, grabando lo que allí ocurre, a convertirse en el activo clave de la orgía y uno de los más morbosos de la secuencia. Pero, tirando para casa, nos quedamos con la interpretación de los dos españoles, Denis Vega y Dani Robles, sobre todo éste último. El malagueño desplegó nuevamente su faceta más versátil, igualmente creíble como macho activo que como pasivo sumiso.

Pero, su tuviéramos que quedarnos con algo, nos quedaríamos con el protagonismo del semen en esta escena y en el resto de la película. No hay nada más realista, ya que hablábamos del realismo del cine europeo, que ver a cinco tíos que acaban de disfrutar de una placentera escena de sexo, disfrutando, a su vez, de la leche de sus amantes, sin las antinaturales caras de asco de algunos actores en otras producciones. Por todo ello, la escena final de Paris Perfect es una orgía perfecta.


  • LO MEJOR: El realismo de la escena. Todo es creíble.
  • LO PEOR: Los rápidos movimientos de cámara del inicio.
  • UNA CURIOSIDAD: Nominada a mejor escena europea de los Prowler European Porn Awards.














Comentarios

Lo más visto