De motoclub gay a perfil de fotografías eróticas

Nos acercamos a la fotografía homoerótica de Pistones Cachondos

Sus pasiones son la fotografía, el motor y viajar, por ello no es extraño que pasase de motoclub gay a perfil de fotografías eróticas bajo el nombre de Pistones Cachondos. Lo de aunar a moteros gay no funcionó pero sus fotografías sí, y es que le encanta reflejar los fetiches de sus modelos o, simplemente, usar el cuerpo masculino como elemento de belleza. El resultado es un perfil en el que el erotismo y el morbo están servidos.


Aunque es más conocido en redes sociales como Pistones, su nombre es Íñigo, tiene 40 años y nació en Valladolid. La fotografía es una de sus pasiones, que comparte tiempo con viajar y los coches. En muchas ocasiones, confiesa, "consigo fusionar todas mis pasiones, lo cual me encanta". Dice ser "un culo inquieto y al que le cuesta quedarse en el sofá sin hacer nada. Aunque reconozco que una tarde de peli y manta con buena compañía me priva también". Se considera una persona conformista y tolerante, dispuesto a hacer de todo y a probar experiencias nuevas.

Quién es Pistones Cachondos y por qué ese nombre artístico

Pistones Cachondos es un perfil de fotografía erótica masculina, pero en realidad el nombre surgió con la idea de crear un club para moteros gays, pero resultó ser un fracaso. Porque, o hay muy pocos moteros gays o el armario es tan profundo como un pozo sin fondo. Así que tras unos años sin usarlo, decidí resucitarlo para el tema de la fotografía erótica y a día de hoy es lo que es. Aunque sigo tratando de abrir un poco la ventana a ese público gay apasionado del motor que les guste mezclarlo con el erotismo. 

El erotismo en la fotografía

Como suelo decir a mis modelos, me gusta reflejar los morbos y fetiches de cada uno de ellos. Aunque, en muchas ocasiones, las fotografías tratan de utilizar el cuerpo masculino como un elemento de belleza por sus formas, contrastes y colores. Me gusta resaltar lo mejor que puedan tener. Una mirada, por ejemplo, puede desprender mucho más erotismo que un culo.

Por ello, soy más de sugerir. Provoca más muchas veces lo que no se ve, que lo que se muestra abiertamente. Prefiero que el observador sepa o piense que el modelo está desnudo aunque no lo vea directamente.


El mejor modelo, el que tiene interés

Como suelo decirles cuando me preguntan qué tipo de modelos busco, lo mas importante es “querer posar”. No hay mejor modelo que el que lo hace con ganas e ilusión. Prefiero a un chico que tenga ganas de posar como experiencia nueva que un chulazo creído que lo que busca es solo fotos para aumentar su lista de amigos en Instagram. Por no decir los que piensen que pueda ser una excusa para tener sexo con el fotógrafo o con otro modelo en una sesión conjunta. El mejor modelo: el que tiene interés.

Seña de identidad de Pistones Cachondos

No tengo una técnica o estilo tan marcado que me pueda identificar claramente. Manejo diversas técnicas, blanco y negro o color, estudio y aire libre, fetiches… cada sesión y cada modelo son diferentes y requieren un tratamiento diferente. Incluso dentro de una misma sesión tienen cabida varias técnicas y estilos, así que por eso no quiero tener una identidad tan marcada que me encasille en hacer sólo fotos de un mismo estilo.

Antes de una sesión, me gusta conocer a los modelos, haber tomado con ellos una caña, para conocernos y que no se sienta tan violento el día de la sesión. Si por circunstancias no puede ser eso y nos conocemos personalmente el día de la sesión, prefiero perder tiempo antes de hacer fotos en romper el hielo con una caña, charlando de cómo va a ser y así poder resolver las dudas que puedan tener.

Y no me voy de una sesión sin tener la certeza que el modelo se lo ha pasado bien, ha estado a gusto y se va con la sensación de que tomó una buena decisión de elegirme como fotógrafo para unas fotografías de estas características.


Cuesta sacar el lado exhibicionista

Por lo general no. Incluso los que a priori manifiestan que les da vergüenza, que no lo han hecho nunca, o que son muy pudorosos, poco a poco se van soltando y si que terminan mostrándose en todo su esplendor ante la cámara. En cuanto van sintiéndose cómodos, en muchas ocasiones tengo incluso que pedirles que se corten un poco, jajaja. Hasta el momento no me he encontrado con ningún modelo que no se haya querido quedar completamente desnudo.

Yo también tengo mi punto. ¡Claro que si! De hecho, antes de desnudar a modelos ya me desnudé yo delante de la cámara de un par de fotógrafos amigos míos. Y ahora también lo sigo haciendo y me gusta. Es una forma de aprender también poniéndose del otro lado.

Fotografía interior o al aire libre

A mí personalmente me gusta más el aire libre, ya que es posible aprovechar el entorno para hacer otras composiciones y jugar con el modelo para lograr imágenes chulas. El interior es más apropiado para el invierno, por razones obvias, jejeje. Cuando hago fotos de interior suelo centrarme más en el cuerpo sin dar oportunidad a nada más que distraiga la mirada. Aunque también hay interiores que tienen tal riqueza visual que son un complemento perfecto del cuerpo.

Cuando son interiores, prefiero que los escenarios sean lo mas neutros y asépticos posibles para que no distraigan al verdadero protagonista que es el desnudo. En algunos casos, si que pueden apoyar y potenciar el desnudo, en cuyo caso si pueden cobrar protagonismo y que se complementen.

En el caso de exteriores, suelo ir al campo. Parajes bonitos en los que aprovecho la luz que haya, en los que pueda jugar con la vegetación, el agua o elementos que haya por la zona. Las infraestructuras también me suelen dar juego por sus dimensiones, líneas y demás. Y los lugares abandonados también dan mucho juego, normalmente llenos de grafitis que me encantan como fondo, los huecos, estructuras….

Además, me inspiran mucho los vestuarios y tengo muy claro qué haría. Vestuarios, duchas, sauna… hay infinidad de ideas que me rondan la cabeza. Lástima que no suelan ser sitios donde se pueda hacer una sesión. Así que si alguien que lea esta entrevista tiene opción de disponer de uno para hacer una sesión, que lo diga.


Su relación con la censura

¡¡¡Malaaaa!!! Muy mala y me lleva los mil demonios. Parece mentira como habiéndolo superado hace mas de 40 años en España, ahora tengamos que estar aguantando a los mojigatos yanquis y su censura en aplicaciones. Me han censurado fotos en las que no se veía absolutamente nada. Fotos preciosas con un valor artístico incontestable y que, porque alguien quiera fastidiar la denuncie, no haya nadie detrás que pueda decidir si  la denuncia tiene fundamento o no. Y ya peor, que te censuren una foto eliminándola de tu red y sin darte ninguna explicación personalizada o que no te den derecho a que puedan revisarla y que haya un mínimo de feedback entre el autor y el censor.

Y aprovecho para decir a los que se dedican a denunciar fotos, que por ese camino no van a conseguir eliminar sus frustraciones. Mientras que escondidos en el anonimato solo contribuyen a que viajemos atrás en el tiempo.

La escena más morbosa que ha fotografiado y la que no

Recuerdo en una sesión que junté a dos chicos que ya habían posado para mi por separado pero ahora lo hacían en una sesión conjunta. Se empezaron a calentar y terminaron enrollándose. Hice fotos muy chulas y muy morbosas cuando estaban a su rollo haciéndose casi de todo, ya que les dejé hacer y yo merodeé a su alrededor tratando de reflejar en imágenes lo que allí estaba pasando. 

Hay muchas escenas morbosas que no he fotografiado. Hace unos años quedé con dos amigos que se conocieron ajenos a mi y cuando quedamos los tresla conversación se nos fue de las manos. Siendo dos chicos que me ponían mucho, me habría encantado haber tenido una cámara para inmortalizar ese momento. Me tengo que conformar con los recuerdos de mi mente.


Profesionalidad o sesiones que se van de las manos

La profesionalidad siempre. Si estamos a fotos, estamos a fotos, que es lo que digo siempre. La verdad es que cuando estoy en una sesión, estoy más pendiente de lo que hago que de otra cosa. Por lo que me doy cuenta cuando estoy tratando las imágenes de lo que realmente allí estaba pasando, sobre todo cuando son sesiones conjuntas. No voy a negar que en mas de una ocasión me he quedado con ganas de soltar la cámara y pasarlo bien… Pero he preferido dejar la mente fría y, si se tercia, ya habrá ocasión de poder quedar con el modelo para algo que no sean fotos si es que hay alguna atracción mutua.

Personajes a los que le gustaría desnudar

Pues no me sale así ningún nombre que diga…. ¡Tiene que posar para mi! Me atrae más fotografiar a gente de la calle, normal, amigos o conocidos que a algún famoso. Me da mucho más morbo el poder hacer fotos a un monitor de mi gimnasio, por ejemplo, aunque no sea desnudo, que a algún famoso, sinceramente.

En cuanto a los modelos de Instagram, podría herir la sensibilidad de algunos modelos míos… Pero, bueno, sí que hay algún chico del vestuario que tengo pendiente de fotografiar.











Comentarios

  1. […] Una faceta exhibicionista que empezó, según nos cuenta, un buen día que su amigo y fotógrafo Pistones Cachondos le comentó la idea de hacerse una sesión. Aunque, “en un principio dije no”, se lo […]

    ResponderEliminar
  2. […] eso ya es el summum de la libertad y el vicio“. Y aquí también tiene que dar las gracias a Pistones Cachondos (Iñigo), “un buen amigo y fotógrafo, del que aprendí a perder el pudor y ponerme delante […]

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Lo más visto