Todo un peso pesado de la industria porno gay

Buceamos en la trayectoria del actor, director y productor porno Michael Lucas

Atesora una carrera de más de 20 años que lo han convertido en la actualidad en uno de los empresarios más conocidos del mundo en el ámbito del entretenimiento para adultos. Se inició como artista porno en la década de los 90 y hoy sigue estando detrás de una de las productoras más afamadas de esta industria, Lucas Entertainment. Él es, como no podía ser de otra forma, Michael Lucas y hoy buceamos un poco por su historia.

Nació en Moscú (Rusia) en el año 1972 con el nombre de Andrei Lvovich Treivas. Era hijo de un ingeniero y una profesora de literatura rusa, superando en aquella época los desafíos de crecer como judío y gay en el marco de la cultura homófoba y antisemita de la Rusia comunista. Quizás por ello, tras graduarse en 1994 en la Academia de Derecho de Moscú, Michael decidió emigrar Alemania. Allí, con una visa de turista y sin una ocupación permanente, empezó como trabajador sexual y dio sus primeros pasos en la pornografía heterosexual.

En Francia, con el nombre de Ramzes Kairoff, apareció en dos películas porno homosexuales, lanzadas en 1996 y, ya como Michael Lucas, grabó cinco películas para Falcon Entertainment, que se lanzaron entre los años 1997 y 1998. Fue en este momento cuando Michael se muda a Nueva York y decide fundar su propia productora, Lucas Entertainment, con la que sigue hasta la fecha. Pronto se convirtió en uno de los estudios gays más importantes y respetados del mundo, produciendo desde entonces más de 300 películas, que han cosechado una docena de premios de la industria.

Su película Michael Lucas, La dolce vita ha sido la película porno gay más cara de la historia, contando con un presupuesto de 250.000 dólares. Era un remake del clásico La dolce vita de Fellini, dirigida por el propio Michael y Tony Dimarco en el año 2006 para la productora Lucas Entertainment. Obtuvo en 2007 14 nominaciones en los premios GayVN's, entre ellos el de mejor director y actor para Lucas, y dos años después, Michael entró en el salón de la fama de GayVN y fue incluido en un reportaje de New York sobre personas que habían llegado a la ciudad sin nada y habían alcanzado la cima.

Y es que esta figura de la industria de entretenimiento para adultos ha sido una de las pocas en tener mucho protagonismo en los principales medios de comunicación. Ha aparecido en publicaciones como la cita revista New York, The New Republic, Vice o The Village Voice. Escribe columnas sobre temas sociales y políticos en cabeceras como The Advocate y Out, además de ofrecer ponencias en numerosas universidades, incluidas Stanford, Yale y Oxford.

En este sentido, Lucas ha sido utilizar su notoriedad como trampolín para defender aquellas causas que le importan, como las libertades civiles, los derechos LGTBI+ y la salud sexual. Además de mostrar su inquebrantable apoyo al Estado de Israel.  Por ello, en el año 2010 renunció a su ciudadanía rusa como protesta por las políticas represivas del país y, un año antes, se convirtió en ciudadano de Estados Unidos e Israel.

Michael Lucas siempre ha sido partidario de la prevención y educación del VIH, siendo en 2013 la primera figura pública en promover abiertamente el uso del PrEP para su prevención.

En 2012,  fundó Lucas Documentaries, a través de los cuales ha dirigido y producido dos películas de no ficción: Desnudando a Israel: Hombres gay en la tierra prometida, sobre la vida LGTBI en Israel; y Campaign of Hate: Russia and Gay Propaganda, que arroja luz sobre la reciente avalancha de legislación antigay en Rusia. Ambos proyectos se han proyectado en numerosos festivales de cine de todo el mundo.

Como escribió la revista gay The Advocate, "Michael Lucas ha utilizado el estrellato que le dio la pornografía como plataforma para hablar en contra de las drogas, el sexo inseguro, la explotación infantil, el antisemitismo, la opresión religiosa de los homosexuales y una serie de otros problemas sociales".