Los que se pelean se desean

Crítica de la escena de lucha y erotismo entre Dio Characi y Steve Manson para Hunkswrestling.

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Nueva semana en la que El Acomodador ha decidido seguir indagando en la fusión de lucha libre y pornografía o, como en este caso, de lucha y erotismo. Y es que volvemos a encontrarnos con la productora Hunkswrestling, que prefiere no traspasar mucho la frontera de la pornografía. Lo hacemos con la escena que enfrenta en el cuadrilátero a Steve Manson y Dio Characi. Un duelo cargado de mucha tensión... sexual.

El primero es ya un habitual de las creaciones de esta productora española que combina la lucha libre con el entretenimiento, tanto en vídeos como en eventos. El segundo, es un chico brasileño, al que, según se presenta él mismo, le gusta la lucha libre, la dominación, la humillación, los músculos y los pies. Por lo que, de entrada, esto promete.

Todo comienza con la llegada a Barcelona de Dio Characi, que viene con un objetivo claro: poner a prueba la elasticidad en las piernas de Steve Manson. Este suele presumir de entrenarlas a diario, por lo que no le hace mucha gracia el reto que le pone su contrincante y acaba enfadándose. Ambos, como era de esperar, se enzarzan en una lucha física y psicológica bastante fuerte... Como nos gusta. Ya sabemos que Steve tiene grandes habilidades como luchador, pero ¿serán suficientes para hacer frente a la fuerza y la decisión de este guapo brasileño?

Y así es como empieza todo, con un Steve Manson, bien ajustado y bien marcando, haciendo uso de un curioso artefacto con el que ejercitar la flexibilidad de sus extremidades inferiores. Por cierto, nos gusta que Hunkswrestling se monte un set de lucha en cualquier rincón imaginable, como un garaje o, en esta ocasión, lo que parece ser una terraza. Ese punto amateur, que tanto nos gusta, le da realismo a la escena.

Pero, volviendo al tema de la flexibilidad, no es lo mismo que seas tú el que marques tu resistencia a que llegue otro tío, también bien ajustado y marcando, como Dio Characi, y tome las riendas de tu ejercicio.  Este brasileño, ya lo intuíamos, viene dispuesto a poner a prueba sus dotes para la dominación y la humillación. Eso sí, desde el principio, chico listo, la mano va al paquete de su contrincante, como nos gusta. Yo te tiro de las piernas y te pongo en alerta, pero te magreo bien la polla y los huevos.

Una de cal y una de arena, ya que, cansado del aparatito de tortura, Dio sigue estirando el cuerpo de su contrincante, sobre todo cuello y piernas, haciendo uso solamente de su anatomía y de su fuerza. Nos pone y mucho ver a dos machos ahí enrollados (los cuerpos, me refiero), presumiendo de fuerza y virilidad en este bis a bis de a ver quién puede mas. Eso algo que nos podemos encontrar en cualquier gimnasio que practique esta modalidad. La gracia de Hunkwrestling es que da un paso más y nos muestra lo que nos gustaría ver si presenciáramos una de estas luchas de titanes: que se metan mano y se toquen bien los paquetes, que no paran de crecer entre tanto toqueteo.




Por cierto, qué bien les sientan a estos muchahos esos monos de lucha libre. Dejan al descubierto los pezones, por si Dio Characi se los quiere pellizcar a un Steve Manson que nos regala una interesante perspectiva de su trasero a cuatro patas. No hay nada mejor que la licra, ya que, aunque vayas vestido, puedes ver, como si tuvieras rayos x en los ojos, hasta la raja de su culo. Además, una sesión con este brasileño debe ser mejor que ir al fisio y, si no, que se lo digan a Steve, que no para de gemir de dolor en todo momento con unas expresiones faciales que, creo, no deben ser nada fingidas. ¡Qué meneos le mete a su cuerpo! Con esas posturas imposibles que marcan la anatomía muscular como nada.

Estiramientos a un lado, Steve reta a Dio a una lucha cuerpo a cuerpo y, para ello, se bajan la parte alta de sus monos, mostrándonos a todo sus torsos perfectamente ejercitados. ¿No creéis, como yo, que no hay nada más morboso que ver a dos tíos luchando? Ya lo habré dicho en alguna ocasión, cuando he hablado de Hunkswrestling, pero hay muchas similitudes entre luchar y follar, con la excepción de la penetración o la felación, a las que no echamos de menos. Esos cuerpos que se revuelven y retuercen en el suelo, bien pegados uno al otro, rozándose, con las caras a milímetros escasos de distancia...

Y aquí juega un papel fundamental el cámara y, luego, la edición  o montaje, combinando los planos más generales, con esos contrapicados que nos sitúan bien en la lucha, y otros más cercanos con los que entramos en detalles de las posturas o que nos permiten ver, más próximas, las partes de sus cuerpos que más nos llaman la atención en este momento.

Además, en esta escena los chicos están especialmente juguetones, como cuando Dio Characi le pone el pezón en la boca a Steve Manson y le pide que se lo chupe; o ver como Steve, tras un instante muy intenso de tener a Dio sobre él muy próximo, está empalmado en plena lucha; ¿y qué me dicen del momento te como la boca?... ¡¡too strong for us!!. Pero hay más. Uno de los mejores instantes es cuando el brasileño se sienta sobre el español y le pone todo el paquete en la cara; le mete los huevos en la boca, mientras le roza su pene erecto; y simula, con sus movimientos, que le está follando la boca (todo ello con la vestimenta de lucha puesta). Y al revés: Dio, tumbado en el suelo, sujeta la cabeza de Steve entre las piernas y se la agarra con las manos, como si le estuviese haciendo una mamada.

A partir de este momento, los últimos minutos vuelven a ser más de lucha libre pura y dura. Quizás sobran, porque la escena se puede alargar demasiado y ya sientes que lo has visto todo. Aunque, es una escena perfecta si quieres huir del porno al uso y explorar fetiches como pezones, pies, licra y, por supuesto, lucha. Muy buen producto.

  • Lo mejor: La tensión sexual que tiene esta pareja.
  • Una pega: Que le sobran algunos minutos.
  • Una curiosidad: Hunkswrestling es la única productora española de lucha erótica.
  • Puntuación: ★★★★☆

Si quieres ver nuestra parte favorita de la escena, entre en el siguiente enlace.



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